la jefa parte 5

CAPITULO 13 : DAR Y RECIBIR

— Mira, daría lo que fuera por no sentir lo que siento. Daría lo que fuera por no ser consciente de que  solo soy un clavo ardiendo incluso  daría lo que fuera porque te gustase de verdad , pero…

— Y yo daría lo que fuera porque te callaras y me besaras — Dijo Rubén interrumpiéndola. Sin moverse, Patricia vio cómo este la atraía hacia él, aunque intentó resistirse,  no lo consiguió. Le gustaban sus besos. No sabía por qué, pero le gustaban, y eso comenzaba a asustarla. Ajeno a los pensamientos de Patricia, Rubén devoraba con pasión aquellos  labios. A pesar de la resistencia que ella opuso al principio, era consciente de cómo poco a poco volvía a dejarse llevar.

— Ejem… ejem — tosió una voz a sus espaldas que hizo que ambos se separaran. Ante ellos estaba Valeria Prado, quien con una mirada asesina  interrumpió aquel romántico momento, momento en el que Rubén, tras mirar a Patricia durante unos segundos, se marchó con su todavía esposa a una cafetería y allí dispuesto a aclarar algunos asuntos le gruño — ¿Tu de que coño vas? —

—  No uses ese vocabulario soez conmigo eh Rubén Tudela eso de primeras y de segundas  creo que tenemos que hablar — Dijo ella que intentó cogerle la mano.

— O me quitas tu  asquerosa mano de encima o te juro que no respondo — Bufó el haciendo que Valeria la apartara.

— Es increíble — Suspiró la rubia —. Estar con esa pobretona esta haciendo que tengas  esos modales de camionero

Rubén  la miro y se pregunto a si mismo , cómo podía haber estado enamorado de aquella tipa. Compararla con Patricia Montemar era imposible. Era como comparar a Audrey Hepburn con Marujita Díaz, y sin poder remediarlo se rió por dentro, aquella comparación era odiosa, y se avergonzó por haberla hecho.

— ¿Puedo hacerte unas preguntas?

— Dime Rubén

— ¿Cómo se te ocurrió ponerme los cuernos con mi hermano tres semanas antes de nuestra boda? ¿Y sobre todo porque te casaste conmigo si no me amabas?

Aquellas preguntas la bloquearon. En todos los años que habían ejercido como pareja, Valeria llevó las riendas de su relación. Al principio porque el pianista estaba impresionado con ella, y al final porque se había acostumbrado a intentar complacerla. Sólo conformidad, conformidad y más conformidad.

— No sabes qué decir ¿verdad Valeria? — Dijo dirigiéndose hacia la puerta.

— ¿Dónde vas ?

— Me voy a mi casa . Que disfrutes del café que has pedido y de la tarde

Y al entrar por la puerta de su coche el pianista sintió una seguridad en el mismo que no había tenido nunca. Metió la llave y se arranco el coche sin pensar en nada mas. A la mañana siguiente Laura, desnuda en la cama, se estiraba satisfecha de la maravillosa noche de sexo que había compartido con Jorge no sabía la hora que era, ni le importaba. Sólo sabía que estaba cansada y feliz, por lo que, dándose media vuelta, volvió a poner la cabeza encima de la almohada, cuando de pronto tuvo que abrir los ojos porque algo le llamó la atención. La cría, al ver que  la miraba, sonrió, dejando al descubierto su boca mellada, mientras continuaba sentada en la silla con los pies colgando.

— Hola — saludó la niña —. Soy Lucia. ¿Por qué estás durmiendo con mi papi?

Laura tardó unos minutos en asimilar aquello, pero al final lo hizo.

— ¿Papi? ¿Estoy durmiendo con su papi? — gritó a punto del colapso, y volviéndose hacia Jorge, que continuaba inconsciente, comenzó a darle manotazos hasta que se despertó sorprendido.

— Laura — susurró aún entre sueños —. ¿Qué te ocurre?

— Hola papa — saludó la niña, dejándolo boquiabierto -. ¿Ella va a ser mi mami?

— Papa — susurró Laura enarcando una ceja —. Esta niña te está llamando papa.

— Sí — él se incorporó despierto completamente —. Ella es Lucia, mi hija

Con la boca abierta Laura lo miró. No sabía ni qué decir, ni qué hacer.

Tampoco podía levantarse, estaba desnuda, y no quería escandalizar a la niña.

— Lucia, cariño- dijo Jorge al sentir la incomodidad de Laura -. ¿Podrías esperar en tu habitación hasta que nos levantemos? Prometo que tardaré cinco minutos.

— Pero papa — señaló la niña —. Es que yo sola me aburro.

— ¡Lucia! — endureció la voz el minero — ¿Quieres salir de la habitación?

Tras suspirar con gracia la niña se levantó de la silla de un salto, pero antes de salir volvió a fijarse en Laura

— Eres muy guapa.

— Gracias, Lucia. Tú eres preciosa — Le dijo Laura  dedicándole una  sonrisa.

Después la niña desapareció, momento en que ella saltó de la cama y, cogiendo sus cosas a la velocidad del rayo, comenzó a vestirse.

— Laura, mírame — pidió Jorge saliendo también de la cama.

— No. No voy a mirarte  porque como te mire te juro que te parto la cara.

— Escúchame, por favor ¿Recuerdas que anoche quería decirte algo ? Pero con nuestras prisas por llegar a la cama no me dejaste hablar.

— Oh… no me vengas con esas ahora — dijo malhumorada —. Te conozco desde hace semanas, y  ni una sola vez te he oído mencionar el nombre de Lucia.

— Por favor, dame un segundo

— No. No te voy a dar ni un segundo — contestó colérica —. Creo que ya has tenido muchos segundos para contarme este pequeñísimo detalle ¡mentiroso!

— Tienes razón, te debo cientos de explicaciones, pero escúchame si no te hablé antes de Lucia era porque tenia miedo.— comenzó a contar Jorge -. Diana la madre era una pamplonesa que conocí en los san fermines de hace seis años . Era alocada, pero eso me divertía de ella, y dos meses después se trasladó a Baracaldo a vivir conmigo y a pesar de los rumores de que tonteaba con otros hombres yo estaba tan cegado por ella que me casé cuando se quedó embarazada. Al ser madre, pensé que cambiaría, pero todo fue a peor. No quería saber nada de nuestra hija y su alocada vida comenzó a ser mi peor pesadilla. Tuvo un lío con mi mejor amigo cuando Lucia tenia 13 meses  y la noche en que los descubrimos Fanny y yo… ella cogió su coche  para intentar huir y se estrelló contra un árbol al salirse del camino. Murió en el accidente. A partir de ese momento y mi familia y yo pasamos a llamarla «la difunta».

– ¿Cómo has podido ocultarme algo así ? ¿Qué más me ocultas?

— Nada más — se sentó en la cama derrotado.

— No te creo — Laura nunca había soportado la mentira, y muchas veces se había tenido que enfrentar a ella —. Ya no te creo.

Y terriblemente enfadada salió de la habitación hecha una furia y con rapidez se dirigió hacia la puerta de la calle. Pero cuando la abrió notó que alguien tiraba de su falda. Al volverse se quedó parada. Era Lucia

— ¿Por qué te vas? — preguntó la niña.

— Tengo prisa.

— Te has enfadado con mi padre por mi culpa ¿verdad? — susurró la niña con un puchero que hizo que la morena se sintiera mal

— Oh, no cariño — dijo cerrando la puerta, y agachándose prosiguió —. Tú no tienes culpa de nada. Es sólo que tu papá y yo somos adultos y los adultos muchas veces se enfadan.

— Entonces ¿por qué te vas? — murmuró la niña —. ¿No quieres ser mi mamá?

— Lucia — suspiró Jorge, que salió vestido de la habitación —. Ella se va porque papá no se ha portado bien con ella. Hice algo que no tenía que haber hecho, y de lo cual estoy seguro que me arrepentiré el resto de mi vida.

— Pues pídele perdón — señaló la pequeña mirándolo —. Tú siempre me dices que cuando uno hace algo malo, lo primero que tiene que hacer es pedir perdón.

— Lucia ven aquí cariño — susurró  incapaz de mirar a Laura.

— ¿Por qué no perdonas a mi papi? Es el mejor papi del mundo, y es muy divertido. Además sabe jugar a las muñecas y cuenta unos cuentos muy bonitos ¿y sabes lo mejor? Hace unos desayunos muy ricos.

— Laura, cariño, ven aquí y calla — sonrió con dulzura el minero. Conocía las carencias de su hija y una de ellas era encontrar una madre.

— Pero papi — protestó la niña —. Siempre has dicho que cuando trajeras a casa una chica, sería porque ella era especial.

La dulzura y el abatimiento en la cara de Jorge al llamar a su hija fue lo que hizo que a Laura le comenzara a latir el corazón con más fuerza aquel le había robado el corazón, y ya nada volvería a ser como antes. Era inútil marcharse. No quería . Así que se levantó, y mientras agarraba la manita de la niña, dijo mirando a el minero con una sonrisa.

— ¿Es cierto que haces unos desayunos muy ricos?

Al escuchar aquello Jorge, no supo si reír o llorar. Sólo pudo mirar a aquella mujer que desde que había aparecido en su vida le había alegrado el corazón.

— Lucia — dijo con el corazón a punto de estallar —. Ve a la mesa de la cocina y pon un cubierto más. Laura se queda a desayunar.

— ¡Bien! — gritó la cría emocionada, que corrió hacia la cocina.

Jorge Arteche se acercó lentamente a ella, y la tomó de la mano. Al ver que sonreía, él también lo hizo.

— Te quiero con toda mi alma , y haré todo lo que esté en mi mano para que nunca te quieras separar de mí.

Emocionada y a punto de llorar, lo besó con amor.  Era el hombre que siempre había buscado y ella sabía perdonar.

— Lo primero es lo primero — suspiró haciéndole sonreír —. Demuéstrame que sabes hacer el desayuno más rico del mundo, y cómo juegas con las muñecas, y después hablaremos.

Por su parte Juana ajena a lo que le estaba ocurriendo a su hija mayor decidió seguir el consejo de su compadre Aquilino, y aquella tarde fue a averiguar mas sobre el oro de las tierras del chamuco con los niños Montemar, y tuvo suerte ya que al llamar a la puerta se encontró con Maximiliano solo en la casa, pero la jefa al verlo se quedo en estado de shock durante varios segundos, ese niño le recordaba a su hijo Marcos.

-¿Piensa quedarse ahí señora?-Pregunto Max

-No, claro ¿Estas solo?

-Si señora, ¿Desea tomar algo?

-Un te por favor-Le respondió ella aun alucinada por el parecido físico con su hijo Pero al irse a sentar a la silla del comedor se fijo en lo que había en la mesa

.- Esos diccionarios que tienes son bastante viejos porque no le dices a tus padres que te compren unos nuevos

-Solo tengo madre doña Juana, y ni me importa mi padre fue un desgraciado que nos abandono antes de que naciera-Le contesto el niño triste y durante un rato la jefa de Baracaldo estuvo intentando sacarle información sobre su abuelo al niño, pero no consiguió nada porque no sabia nada sobre la mina ni de los planes de Julio.

Por lo que se despidió pero antes de irse vio la foto del niño y sin que Maximiliano se diera cuenta la guardo en su bolso. Juana intuía que el parecido con su hijo no era casualidad. “Tengo que investigar” se dijo mentalmente de camino a su casa. Y  tras llegar a su casa y ver las fotos de la comunión de su hijo Marcos se cercioro de que su parecido físico con Maximiliano  no eran ideas suyas, y dispuesta a demostrar que ese niño era posiblemente su nieto llamo a Aquilino para pedirle ayuda.

-¿Te suena la cara de este niño?

-Si es Marcos tu hijo, recuerdo lo mal encarado que era y sigue siendo

-No, no lo es Aquilino este niño es el nieto de Julio Montemar y quiero que averigües todo lo que puedas sobre el , colegio, fecha de nacimiento. Todo ¿Podrás hacerlo?

-Dalo por hecho Juana , lo que no entiendo es cual es tu interés por el

-Digamos que su parecido con Marcos no puede ser casualidad y que la vida quiere consentirme, primero el oro y ahora un nieto. Y todo guarda relación

-¿Me estas diciendo que  este niño podría ser tu nieto ?¿ Es decir que tu hijo se acostó con la hija de un simple minero?. Para que luego digas de Laura, tu niñito  Marcos es igual. Y al seguro que no le recriminas con tanta vehemencia

-No se acostó con ella Aquilino…uso la fuerza ¿Si me entiendes no?.

Y Juana ante un alucinado Aquilino lo contó la verdad. Mientras en Madrid Diego y Filomena estaban en la iglesia donde se iban a casar los dos primeros.

— Filomena querida — pareció querer aclarar Elena —. Tu no te preocupes que la empresa que organiza la boda se encargará de todo. Son los mismos que organizaron la boda del marqués de Villaverde y Carmen Franco e hicieron un arreglo floral precioso , con tulipanes frescos traídos especialmente de Holanda

-¿Y para qué fueron hasta Holanda, con las flores tan preciosas que tenemos en España?. Si en la plaza hay una floristería  maravillosa que tiene de todo.

— Seguro que sí, pero repito las flores de la boda serán las mejores y las mas preciosas Filo. ¿Y sabes porque?. Porque yo soy una mujer exigente, y para mi boda exijo lo mejor ¡cueste lo que cueste! — Afirmo Elena -. Quiero que mi boda sea un evento maravilloso. ¿Acaso no quieres lo mismo para tu querido Diego?  . En esto último había más veneno que en las glándulas de una cobra del desierto.

— Por supuesto ¡chata! — No se amilanó Filo, aunque sí se mostró incrédula con la poca educación de aquella estúpida, y lo que más deseaba en aquel momento era meterle uno de los candelabros del altar por el culo. «Aquello empezaba a parecerse mucho a su peor pesadilla», pensó Diego, mientras el pulso le palpitaba sin parar . Necesitaba un minuto, sólo un minuto.

— Disculpadme un segundo — Las interrumpió, apretando los labios y dirigiéndose hacia una pequeña puerta lateral.

— Yo también tengo que salir — Se disculpó su  nana con una estudiada sonrisa y salió detrás de el. Cuando llegó a su altura le encontró híperventilando.

— ¡Esto es una pesadilla! — Jadeó Diego —. ¿A qué está jugando Elena?

– Escúchame y respira – Señaló Filo quien con solo pensar en tener que aguantarla, palideció de horror -. Tu sabes como se las gasta y no va a cambiar a estas alturas. Pero  esto lo estas haciendo por tu bebe no te olvides y cuando lo tengas en tus  brazos, veras que ha valido la pena sacrificarte por el.

— Espero que tengas razón — Asintió aceptando el abrazo de su nana—. Gracias Filo. Eres maravillosa. Siempre sabes lo que necesito.

-¿Ya estas mejor?-Le cuestiono. El asintió con la cabeza-Entonces entremos cuanto antes terminemos con esta comedia absurda mejor

Y con paso lento y cuchicheos, los dos entraron en la iglesia para ensayar la que sería, en palabras de Elena , la «boda del año». Los días fueron pasando y en Baracaldo Juana estaba hablando con su compadre Aquilino ya le tenia información de Maximiliano. La jefa al ver la fecha de nacimiento y el grupo sanguíneo que era el mismo que el de Marcos empezó a recordar lo que le dijo su hijo y las cuentas le empezaron a cuadrar

-¿Y esa sonrisa Juana? -Le pregunto con curiosidad Aquilino

-Que por fin voy a tener el nieto que tanto deseo

-Controla tu euforia querida que eso tienes que probarlo, y hablando de cosas deseadas , también he aprovechado para averiguar cosas  del Chamuco.

-¿Y que has averiguado?

-Que nuestro querido Julio junto al periodista han contratado a un abogado de la capital para que le lleve el asunto, me lo dijo Gervasio que estaban el y el periodista en el café Reyes hablando y digamos que el abogado bebe mucho….

-Pues vamos a tener que quitárnoslo de encima. Llama a Perona

-No, nos conviene matarlo, seria sospechoso. Déjame que piense algo

-Esta bien, pero que sea rapidito Aquilino-Le respondió la jefa

 

CAPITULO 14 : DISGUSTOS

Diego y Elena quedaron para comer y a ultimar detalles de su boda a la casa de este ultimo. Como así sucedió, Filo no estaba de acuerdo con esta boda y por el gesto taciturno de Diego sabia que lo estaba pasando mal. Y se distrajo tanto que al servirle a Elena le derramo la sopa sin querer

— ¡Bendito sea Dios! ¡¡¿Estás tonta o que Filo ?¡ ¡ -Grito Elena furiosa

-Lo siento  ha sido sin querer -se disculpó ella

-Lo siento, lo siento.- Le contesto Elena de forma burlona -Si no estás capacitada para servir una simple sopa deja este trabajo ¿Has entendido inútil?

-Te he dicho que lo lamento, no era mi intención tirarte la sopa, porque si así hubiera sido no te la habría tirado en el vestido, sino en la cara maldita bruja

-¡¡¿Quién te has creído que eres para hablarme así chacha de tres al cuarto?¡¡

-Mi familia ¿Te parece poco? — respondió Diego con la vena del cuello a punto de estallar —. Te guste o no Filo y Rubén son mi familia. Y a partir de este instante, te agradecería que eligieras muy bien tus palabras y tus modales cuando quieras hablar o dirigirte a cualquiera de ellos. Porque te informo

por si no lo sabes, que puedo ser tan dañino como tu Elena Padilla

— Me voy — dijo de pronto Filo y antes de que ninguno pudiera decir nada,

— Pero ¿qué bicho le ha picado ahora a ésta? — preguntó Elena.

— No lo se tu sabrás querida — dijo con desprecio Diego Mientras en Baracaldo Laura tras almorzar ese mediodía con las hermanas de Jorge y con Natalia ya que estas las habían invitado para conocerse mejor la joven economista salió a la terraza de la casa a fumar un cigarrillo.

— Hola – Saludó Jorge que apareció de pronto —. Fany me dijo que estabas aquí.

-Buenas tardes mi cielo-Le respondió ella. El solo le tomo la mano y le dijo

— Ven quiero enseñarte algo.

— ¿Dónde vamos? — pero él ya la había llevado hasta donde estaba aparcada su moto —. Yo en ese trasto no me subo. Me dan pánico.

— Vamos a ver, Laura — sonrió ladeando la cabeza —. ¿Te fías de mí?

— Mmmm — susurró divertida —. ¿Crees que debo fiarme de ti?

— Creo que sí — y le puso el casco sin que ella protestara.

— Tú ¿no te pones casco?

— Sólo tengo uno — dijo abrochándose la cazadora —.  El único que tengo es para ti. Tu eres mas importante

Aquellas palabras la llenaron de felicidad y subiéndose a la moto se agarro con fuerza a su cintura. Sentirlo tan cerca era todo lo que quería y necesitaba, circularon por unas intransitadas carreteras hasta llegar a un sitio en el que Jorge Arteche se detuvo. — Te voy a enseñar algo que sólo se ve en esta época del año.

Subieron una pequeña colina agarrados de la mano donde Laura Beltrán pudo observar pájaros de diversos colores, formas y tamaños. Como un entendido en la materia Jorge le fue señalando y hablando de los urogallos, piquituertos, incluso incrédula pudo admirar el vuelo de un par de águilas reales.

— ¡Dios, qué bonitas! — susurró la morena mirando sus siluetas en el cielo.

— Te amo y quiero casarme contigo— Susurró Jorge —. Antes de que digas nada, sé que es demasiado pronto  porque como aquel que dice hace tres días que nos conocemos, pero jamás había sentido esto por ninguna mujer, porque cada vez que te veo quiero besarte y lo peor de todo … pero Laura, incrédula de que algo tan de película de Hollywood le estuviera pasando a ella, dio un paso hacia él y lo besó. El impacto que sintió Jorge al recibir aquel beso le dejó conmocionado durante unos segundos. Laura Beltrán, la mujer que más deseaba en el mundo, lo estaba besando. Con delicadeza, mientras la besaba, subió la mano hasta su mejilla y la acarició, para después enredar sus dedos en aquel oscuro pelo y rozar su sien. En ese momento Laura se sintió arrastrada por la pasión, y sintió que toda ella ardía de deseo y lujuria por él

— Te deseo tanto que si continuamos así te voy a hacer el amor aquí y ahora.

Laura, suspirando, se lamió los labios dando a entender su conformidad Y cinco minutos mas tarde ambos se encontraron haciendo el amor apasionadamente en aquella colina. Tres días después  Laura Beltrán vestida con un oscuro traje, aparcó el coche y con el maletín en una mano  se encaminó hacia la oficina

— Buenos días, señorita Beltrán. — Saludó Julián que sacó un pequeño cuaderno y comenzó a cantar como los niños de San Ildefonso —. La reunión convocada para las 9:30 ha sido retrasada a las 9:45; el motivo es porque Don Aquilino llegará un poco más tarde. A las 12:00 vendrá a visitarla el señor Jiménez, responsable de la empresa de estudios geológicos.

— Julián, me gustaría hablar contigo. ¿Podrías sentarte?

Y tras cerrar la puerta del despacho Laura volvió a sentarse, pero en la silla que estaba junto a su asistente. — Lo primero que quiero pedirte disculpas por lo mal que te lo he hecho pasar algunas veces con mis malos modos y mi mala actitud .

Julián sorprendido por aquello, no acertaba a hablar.

— Oh… no, no se preocupe señorita Beltrán.

— Laura llámame Laura y sí que me tengo que preocuparme muchas veces he sido  demasiado exigente y dura contigo una digna heredera de mi madre, y antes de dejar  la dorada quiero escuchar que me perdonas. Por favor.

— ¿Dejar la mina? ¿Por qué? Eres una economista excepcional. No creo que a tu familia  le interese que…

— De eso quería hablarte — intervino la morena —. Voy a volver a Paris , pero no te preocupes por tu puesto de trabajo esta asegurado, voy a dejar a Diego Tudela al mando, ya esta avisado de lo que hay que hacer, vendrá el día 15 de febrero Ah y una ultima cosa, de momento te pido discreción.

— Soy una tumba, jefa — le respondió disimulando su tristeza por su marcha Y a las 9:40 Laura, con paso firme, entró en la sala de reuniones. Ya estaban todos esperándola. Pocos minutos mas tarde y tras darles detalles de la empresa la morena  les informo de su marcha para después de la finalización del estudio geológico y tras decir esto se fue a su despacho , seguida por su madre

-¡¡¿Cómo que te vas?¡¡ ¿Y la mina? ¿Y tu familia?. ¿Qué pasa que para ti somos una mierda?. ¡¡Eres una puñetera egoísta¡¡-Gritaba la jefa de Baracaldo

-No te hagas la victima  Juana Blasco porque te avise desde el principio que mi vuelta a Baracaldo tenia fecha de caducidad eso de primeras y de segundas a lo mejor si tu comportamiento y tu actitud hubieran sido otras, me pensaría quedarme pero esta claro que tu y yo nunca nos vamos a llevar bien y para estar como perros y gatos es mejor que estemos lejos la una de la otra. Mamá, gracias por habernos parido a Natalia y a mi ni pero no te soportamos y en cuanto a la mina te diré que va a estar bien atendida Diego Tudela, se hará cargo de ella.

En ese momento a su madre le empezaba a temblar la barbilla

— Que injusta y que cruel eres conmigo Laura, yo solo me he dedicado en cuerpo y alma a que tu y tu hermanos seáis felices , y que aspiráis alto en la vida

-No mama tu no te has dedicado en cuerpo y alma a que seamos felices ni para que llegásemos alto en la vida te has dedicado en cuerpo y alma a intentar que cumpliésemos tus sueños y fantasías que es muy diferente. Jamás te has preguntado ni nos has preguntado que queríamos para ser felices

-Se que no soy perfecta, pero nadie lo es ¿O acaso tu lo eres?. Porque creo que no, mira yo solo te pido un poco de comprensión Laura yo me he  quedado  viuda hace apenas cuatro meses tu hermano es lo que es y ahora tu quieres irte a Paris junto a ese minero de pacotilla y Natalia que por cierto te recuerdo es menor de edad y esta bajo mi tutela . No puedes llevártela así sin mas

-¿ La misma comprensión que aplicas tu a los demás?. Tu no puedes pedir comprensión después de lo que haces y dices. No te la mereces y me da igual como te pongas, es mi decisión y en cuanto a Natalia si es menor de edad pero te recuerdo que ya no es un bebe tiene 16 años y por tanto uso de razón, ella puede decidir o decir frente a un juez lo que quiere y lo que quiere es irse conmigo. Cosa que no debería extrañarte Juana porque tu misma con tu indiferencia y frialdad has provocado eso, quien mucho se ausenta pronto deja de hacer falta.

Y su madre dolida por esas ultimas palabras sinceras se levanto y se fue del despacho de Laura. No sin antes jurarse a si misma acabar con Jorge Arteche. Al mismo tiempo Rubén quedo con Valeria para exponerle la idea de que le comprase el piso a Elena . Y aunque le costo convencerla al final lo logro. Por lo que esa misma tarde la rubia preparo su viaje a Madrid dispuesta a recuperar lo que era suyo, lejos estaba de imaginar el pianista que la rubia quería recuperar ese piso para revenderlo y quedarse definitivamente en Bilbao. No pensaba darse por vencida y menos dejar que una “simple “ abogada le “quitara” a la única persona que la había querido. Por lo que a la mañana al llegar a Madrid se fue a hablar con su tía Elena aunque la odiaba  y sobre todo odiaba que supiera allanar el camino a su gusto, para luego entrar a matar. Pero no. ¡No pensaba entrar en ese juego! Ella tenía un autocontrol excelente y no iba a permitir que su tía se lo derrumbase A verla Elena se quedo sorprendida y la rubia le pregunto con sorna

-¿Puedo pasar a tu casa?-

-Si claro-Le respondió ella para luego cerrarla puerta con sigilo, regresando detrás de su sobrina al salón, un salón frío e impersonal, ya que había tirado todos los detalles personales de Valeria y Rubén  y había cambiado los muebles

— ¿Quieres tomar algo?

– No tengo tiempo ni ganas de tomar nada lo que tengo que decirte es importante

— Muy bien ¿A qué esperas? Estoy deseosa de escucharte

— Tenemos pruebas de que has conseguido este piso de forma ilegal porque cuando una persona rechaza la donación de un inmueble , propiedad, o empresa es la persona que quiere donarla la que decide que hacer. Y ni Rubén ni su abogada han recibido ningún aviso del notario al que me llevaste, ni de mi ni mucho menos de ti . Por no hablar que ese poder notarial que en el que supuestamente Rubén pone el piso a tu nombre es mas falso que tu que ya es decir también hay una grabación que la abogada de mi marido le “obligo” hacer. En resumen estas de mierda hasta el cuello, si te demandamos y vas a juicio todas esas pruebas serán utilizadas, ¿Y sabes donde acabaras?. En la cárcel pero yo y Rubén estamos dispuestos a dejarte en libertad a cambio de que me vendas este piso  ¿Qué dices?. Piénsalo fríamente las dos salimos ganando tu no acabas presa, y ganaras dinero que es lo único que te importa en esta vida y yo recupero lo que es mío-

-¿Y si no quiero?

-Pues lamentándolo mucho te mandaremos a la cárcel. Vamos Elena se lista

-Esta bien, por un millón doscientas mil pesetas te lo vendo

-Trato hecho . Esta misma tarde iremos al notario y mañana tendrás tu dinero.

Como así sucedió pero mientras eso ocurría en Madrid Juana Blasco estaba en Baracaldo hablando con Aquilino que le tenia noticias sobre el abogado de la capital contratado por Julio Montemar

-Como dice el refrán todos tenemos un punto débil y el de ese abogado es irse de putas. Lo vio Gervasio ahí bebiendo y disfrutando en el prostíbulo las burbujas rojas, eso es lo que nos ha dicho a José María y a mi y que le gustan jovencitas.

-¿Y eso que tiene que ver con el chamuco?

-Muy fácil, no hace falta matarlo para quitárnoslo de encima, con tenderle una trampa se ira por su propio pie de Baracaldo y dejara ese caso.

-¿Y que has pensado hacer?-Le cuestiono Juana

-Le gustan las jovencitas ¿No?. Pues muy bien usaremos eso para tenderle una trampa…”abusar” de una menor esta muy feo y es delito ¿Qué diría su familia? ¿Y en el colegio de abogados?. Podrían quitarle hasta la licencia

-Me parece un plan fantástico, ¿Cuándo lo hacemos?

-Esta misma noche, además también podríamos sacarle mas información

Al mismo tiempo Rubén y Patricia estaban hablando sobre lo del piso y la anulación cuando la abogada canónica incapaz de contenerse  levantó las manos, agarró la cara de Rubén y la atrajo hacia ella; y sin dejar de mirarlo lo beso

– ¿Sabes qué es lo mejor de este momento? — Preguntó el después de aquel beso

— No ¿Qué? — Suspiró extasiada, sintiendo cómo ardía.

— Las expectativas, princesita.

— Entonces déjame decirte — Apuntó Patricia antes de besarlo otra vez

—  Que las expectativas que yo veo son magníficas.

En ese momento se escucharon pasos y la voz de Max y Fernando llamándola

— Tú y yo tenemos una conversación pendiente, no lo olvides — Susurró Rubén besándola en la mejilla antes de marcharse por la puerta.

-¿Mama estas bien?-Le pregunto Max al verla tan colorada

-Si, estoy bien mejor que nunca hijo-Le respondió sin saber porque se comportaba de esa manera tan descontrolada.  Ella no era así por lo que

los días siguientes  intentó esconderse del pianista. Estaba avergonzada por lo ocurrido y nerviosa por lo que intuía que podía ocurrir. Lo deseaba tanto, y más tras sus últimas palabras, que tenía miedo de verlo y tirarse a su yugular directamente. Rubén por su parte necesitaba hablar con ella y aclarar de una vez todo aquel juego que se esta volviendo una locura  pero no lo consiguió.

Al contrario que los amos y señores de Baracaldo cuya trampa hacia el abogado que Julio Montemar y su fiel amigo Ignacio Goikoetxea habían contratado para la gestión de la mina del chamuco funciono.

-Tienes mucho que esconder querido, lo que haces esta muy feo.

– Lo mismo digo flamante alcalde de Baracaldo, tan de misa los domingos y tan velador de la decencia y te vas de putas. Yo estoy soltero a diferencia de ti, así que si queréis hundirme hacerlo os hundiréis vosotros también

-No porque yo no me retozo con menores de edad, cosa que tu si querido.

Eso se llama abuso de menores …y es un delito muy grave podrías perderlo todo. Y tenemos pruebas, para demostrarlo. Mira estas fotos y la documentación de esta chica…Que feo

-¿Por qué me habéis hecho esto?. ¿Qué tenéis en mi contra?

-Muy sencillo abogadito de tres al cuarto quieres ayudar  a Julio Montemar con su mina, y eso esta perjudicando nuestros intereses y eso no nos gusta pero como queremos ser buenos vamos a ofrecerte un trato  tu dejas este caso y nosotros nos olvidamos de estas fotos  ¿Qué te parece? -Le dijo Aquilino

-¿Tu libertad o la justicia?. Es tu decisión-Asevero el alcalde de Baracaldo

Y el abogado asustado ante las amenazas de Aquilino y José María acepto dejar en la estacada a Julio Montemar que horas mas tarde recibió la visita del periodista y de su hija de quienes se despidió sin darles mas explicaciones de que había recibido una llamada urgente de su despacho en Madrid

-Piensas lo mismo que yo papa-Dijo Carlota

-Si, a este hombre le han amenazado los jefes de esta maldita ciudad

-Pobre Julio con lo buena persona que es.

-Esto no quedara así Carlota, de mi cuenta corre. No pienso dejar que Julio y su familia pierdan la oportunidad de su vida por culpa de esos perros

-¿Y que piensa hacer papa?. ¿Denunciarlos en la radio?

-No, eso no serviría de nada, ellos juegan como serpientes nosotros también voy a hablar con Patricia hoy mismo para informarla ella sabrá que hacer

Y así lo hizo, pero mientras la abogada canónica estaba alucinada ante la posibilidad de ser millonaria, la jefa de Baracaldo estaba haciendo planes

-Mama, ¿Por qué me estas cortando un mechón de pelo?.

-Marcos, aunque te parezca raro todo esto lo hago por nosotros. Ya te lo explicare a su debido tiempo, tu confía mi hijo.

-Cada día estas peor, Juana Blasco-Le respondió este sin entender nada.

Pero Juana tenia muy claro lo que tenia que hacer, tenia que asegurarse de que Maximiliano Montemar era su nieto y lo mas importante heredero de Julio y Patricia Montemar, aunque en el fondo ella ya sabia la respuesta. Era ambas por lo que horas mas tarde llamo a Aquilino y le dijo lo que tenia pensado

-Si pero falta el del niño y por supuesto debemos hacerlo lejos de Baracaldo

-Ya había pensado en eso, Macario ya esta intentando conseguir un mechón de pelo de Maximiliano, con la ayuda de unos compañeros suyos del colegio, esta tarde lo tendrás todo para que mañana mismo cuando te vayas a Madrid  y lleves a un laboratorio de estudios genéticos los mechones de pelo, aunque sinceramente no se para que yo se que ese niño es mi nieto, la sangre llama

-Pero siempre es mejor asegurarse Juana.

Y todo salio según lo previsto por lo jefes de Baracaldo por su parte Rubén Tudela harto de las llamadas de Valeria durante la semana siguiente y sobre todo harto de la situación con Patricia decidió solucionarlo todo de una vez, por lo que  invito a cenar y a tomar algo sabiendo que su ex aparecería. Durante un buen rato el buen rollo es patente  hasta que el pianista vio a Valeria entrar por la puerta y Patricia al ver la cara de Rubén, se tomo su copa de vino de un trago y sin demora lo besa  La rubia se acerco y al ver eso se paraliza y grita.-¡¡Rubén¡¡

Pero ni el ni la abogada se inmutan, y siguen besándose, el tiempo parece que pasa a cámara lenta mientras ellos se besan sin ninguna prisa, hasta que sus labios se separan y  el pianista con gesto helado miro a Valeria que estaba parada ante el y pregunta-¿Qué quieres pesadita?.

Pero ella no puede ni hablar pero cuando la rubia consigue reponerse dice

-Rubén , no te tomare esto en cuenta pero tenemos que hablar

-Mira querida-Replica este.-Tomate esto en cuenta porque lo pienso repetir tantas veces como quiera. ¡Estamos separados¡. Si te sientes sola, te aburres  o mi hermano pasa de ti como de la mierda ¡¡Pues te aguantas¡¡.

Valeria lo mira y no lo reconoce y en ese momento Patricia se levanto y con gesto serio y amenazante le dijo -Rubén no tiene nada que hablar contigo, primero porque no lo desea y segundo porque esta conmigo y lo mío es solo mío y no permito que lo toque nadie. Por lo tanto desparece

-Ya la has oído Valeria ¡¡ adiós¡¡

-Pero el piso y la anu.. Pero el pianista la interrumpió

-Lo del piso ya esta solucionado ¿No?. Si es así no tienes nada que preocuparte

Una vez que procesa lo que allí ha pasado Valeria se dio al vuelta y se fue ambos se miran y la abogada  descomponiéndose por segundos por su atrevimiento pregunta -¿Acabo de hacer y decir lo que creo que he hecho y dicho?

-Lo corroboro lo acabas de hacer -Le contesto Rubén

-Madre mía, madre mía me he lanzado y luego… debes creer que soy una fresca

-¿A ti te ha gustado ?-Pregunta el y esta sin dudar un segundo responde

-Si…no lo voy a negar

-Pues ya esta.

Al escuchar eso, Patricia por fin sonríe y el la imita y deciden seguir con la cita.

 

Capitulo 15:  VERDADES AL DESCUBIERTO

Aquella noche, Patricia disfruto de una gran cita pero al llegar a su casa recibió empezó a pensar Rubén le gustaba y mucho, y era algo que  también le molestaba, y más teniendo en cuenta su desastroso pasado. En ese momento sonó el teléfono de su casa.

— Dígame.

— Hola. Al escuchar aquello, la joven abogada se quedo helada.

Era Marcos Beltrán junior, pero reponiéndose con rapidez contestó.

— Te he dicho mil veces que no me llames .

— Lo sé — asintió con voz tranquila —. Pero te quiero  y mucho.

— Yo a ti no , haber si te enteras y superas ya de una buena vez lo que paso entre nosotros hace casi 10 años no fueron mas que dos cafés y una salida al cine y si no paso de ahí fue por en primer lugar eras un crío de 15 años y porque me di cuenta de que estas loco  — respondió mientras cogía un cigarrillo. Hablar con Marcos la tensaba.

— Patricia — susurró Marcos —. Aquello que ocurrió la ultima vez que quedamos, fue algo que… Pero te quiero tienes que creerme.  No puedo remediarlo. Te necesito y…

— No quiero escucharte. Adiós.

Una vez colgó el teléfono, sus ojos se inundaron de lágrimas. ¿Por qué no la dejaba en paz? ¿No se daba cuenta de que le molestaba su insistencia?

De nuevo sonó el teléfono y aquello la enfureció.

— ¿Sabes, Marcos Beltrán? — gritó al coger el aparato —. Sólo quiero que te olvides de mí.  ¡Déjame en paz! Olvídate que existo y que.,..

— Ehhhhh, Patty. ¡Para el carro! — gritó una voz desde el otro lado del teléfono

—. Soy Rubén. ¿Qué ocurre ?

— Hola, Rubén aquella la hizo suspirar. Una voz amiga. Las lágrimas aún corrían por sus mejillas.

— Por lo que veo no soy el único admirador que tienes … Yo solo quería decirte que pases una buena noche.

Pero ella no pudo responder. Un puchero contrajo su cara, y de su garganta salió un gemido seguido por el llanto. ¿Por qué lloraba?

— Venga, Patricia. Odio encontrarte así y no poder hacer nada — se quejó sintiéndose inútil en la distancia —.  Respira. Inspira. Respira. Inspira. Conmigo puedes llorar, gritar y maldecir, lo sabes ¿verdad? . Cuentas conmigo

— Sí lo se pero no quiero aburrirte -Susurró ella secándose las lágrimas

-Tu nunca me aburrirías, venga cuéntame que es lo que te pasa con ese tal Marcos. Te sentirás mejor créeme

-Es muy largo de explicar y es muy tarde quizás otro día, no tengo fuerzas

-Esta bien como tu desees, cuando quieras cuéntamelo. Descansa-Dijo finalmente  dándose por vencido. Tras colgar el teléfono la abogada se fue a dormir sin sospechar que su madrastra había escuchado todo incluyendo su discusión con Marcos Beltrán junior. “tengo que averiguar que es lo que ocurre” se  dijo a si misma Narcisa. A la mañana siguiente, cuando Patricia abrió los ojos, lo primero que vio fue su muñeca Nancy azafata en la repisa que había frente a su cama. Con una sonrisa recordó lo ocurrido la noche anterior. Por fin había saltado la barrera  y eso le gustó. Tapada hasta las orejas recorrió con la mirada aquella habitación que durante años fue su auténtico refugio y paño de lagrimas y durante un buen rato  mientras escuchaba a su madrastra canturrear coplilla española por la casa observó uno a uno todos los recuerdos de su niñez pero aunque era domingo no le gustaba ser perezosa y termino levantándose

— Buenos días, cariño — Le dijo Narcisa. No me digas que he cantado demasiado alto y por eso te has despertado.

— No, Narcisa.

-Ahora te preparo el desayuno. Los hombres se han levantado temprano Max y Fernando para ir a jugar al futbol al parque y tu padre para ir al chamuco , ya sabes de cazeria…-Le respondió ella disimulando

-Mi padre ha ido a coger mas muestras de oro ¿Cierto?. No hace falta que sigas disimulando lo se todo, Nacho y Carlota me lo han contado absolutamente todo. Lo que no entiendo es porque no me lo dijisteis vosotros ¿Por qué mi padre me ha mentido?. Me siento como si fuera una cría de 5 años y no me gusta

-Tu padre solo quería protegerte yo muchas veces que te lo digiera pero ni caso me hizo. Pero ya que lo sabes espero que puedas ayudarlo

-Eso ni tienes que pedírmelo, yo siempre apoyare a mi padre. Lo que necesito ahora es saber todo lo relacionado con el testamento de mi madre para ir a reclamar lo que es nuestro a Madrid a la jefatura general de minas

-Cuando venga tu padre el te dará lo que necesitas no te preocupes. Pero ya cambiando de tema no quiero parecer una cotilla pero ahí una cosa que quería preguntarte y quiero que seas sincera conmigo ¿Qué ocurre con Marcos Beltrán?. Se que no me tienes confianza pero si alguien te esta molestando y va a estar llamando a todas horas a esta casa,..no quiero que tu padre bueno ni tu paséis malos ratos .. Y de Rubén Tudela ¿Qué me dices? ¿Le vas a dar una oportunidad?

-Marcos Beltrán y yo hace años salimos un par de veces  yo acepte esas salidas a pesar de la diferencia de edad porque era hijo de mi padrino y me caía bien pero el la ultima vez que quedamos intento besarme y meterme mano y por eso nunca mas quise volver a quedar con el, no solo por eso sino también porque era un crío de 15 años muy guapo y muy simpático o eso creía yo  pero no dejaba de ser un crío  pero el no supera mi rechazo y me acosa. Vive obsesionado conmigo y con la idea de que un día fuimos algo y lo que es peor  cree que algún día seremos algo. Ese hombre esta fatal de la cabeza, aunque no me extraña que sea así de tal palo tal astilla mira como se comporta y trata a la gente su madre doña Juana creyéndose la dueña de Baracaldo y de los que vivimos aquí. Y en cuanto a Rubén- susurró al pensar en él.- Estoy tan colgada por él que sería capaz de cruzar a nado el océano atlántico , aunque a veces sienta que su vida y la mía nunca encajarían.

— Tesoro. Te voy a decir una cosa y espero que no te moleste.

— Dime, Narcisa.

— Si  crees que  Rubén es un buen hombre y lo amas debes darte una oportunidad con el, porque si no te pasarás el resto de tu vida preguntándote qué hubiera pasado si hubieras elegido ese camino.

— Uf…, Narcisa — suspiró Patricia con tristeza —. No es fácil.

— Tesoro, no creas que te lo digo porque ese muchacho tenga dinero, ni nada por el estilo a mi eso me importa un pimiento. Yo sólo quiero que seas feliz.

— Cissa— sonrió la abogada canónica con tristeza — En este momento de mi vida estoy segura de tres cosas. La primera es que amo a mi hijo por encima de todo. La segunda es que mi padre ha encontrado una buena mujer  y la tercera es que yo no sabía lo que era el amor hasta que conocí a Rubén Tudela.

Con un candoroso abrazo Narcisa acogió a su hijastra en sus brazos, mientras con el pensamiento le pedía a dios que intercediera por el corazón de Patricia.

Los días pasaron y la boda de Elena y Diego se acercaba irremediablemente, ya quedaba menos de veinte cuatro horas para el enlace. Ese día fueron a celebrar la comida tras haber ido al ensayo de la boda según Elena todo tenia que ser perfecto, según Diego y Filo era una muestra mas de su egocentrismo

— Quieren un canapé — Dijo un camarero dirigiéndose a los recién llegados

— ¡Anda, Alberto! No sabía que trabajaras aquí.

— Llevo seis meses ¿Y tu que tal estas Diego? — Le contesto su vecino

— ¡Camarero! — Gritó en ese momento Augusto —. Haga el favor de traerme ahora mismo un Martini seco, sin aceituna.

— Enseguida señor — Respondió el joven vecino del Tudela mayor y dejando la bandeja en una mesa cercana se marchó.

— ¿Dónde habrá aparcado la escoba? — Murmuró Diego señalando a Augusto.

— Seguro que ni la aparca. La pliega y se la mete por el culo. — Respondió Filomena comenzando a reír. Pero la risa se les congeló cuando vieron cómo Alberto estaba siendo recriminado por Lloverás y por Elena.

— ¡Soy alérgico al ácido linoleico de las aceitunas! — Vociferó Augusto con altivez —. Y si por el despiste de un incompetente camarero como tú hubiera dado un sorbo de esa copa, ahora mismo estaría en urgencias.

— Deberías poner más atención a tu trabajo — Aseveró Elena —. No olvides que estás trabajando en el Ritz. No en un bar de carretera. Si no estás capacitado para saber lo que es una aceituna deja este trabajo ¿Entendido?

— Si señor. Lo siento señor — Se disculpó por enésima vez Alberto. Y tras una seña del maître desapareció, momento que aprovechó una angustiada Filo para ir tras él. Una vez entraron a las cocinas, Alberto abrió la puerta de una pequeña sala y tras cerrarla enfadado, dio un par de puñetazos a una mesa. Y Filo comprendiendo su frustración y tocándole en el hombro le invito a sentarse.

— Como dice mi abuela «Dios los cría y ellos se juntan». Por eso tienen una suite privada en el hotel que visitan muy a menudo.

Al escuchar aquello a Filo se le erizaron los pelos como escarpias y se quedo sin palabras. Pocos minutos después, la comida comenzó con normalidad. Desde su mesa, la nana de los Tudela centro de nuevo su mirada en Augusto y Elena que se miraban con más morbo que vergüenza. “¡Por Dios!. Pero si están haciendo el amor delante de todos y Diego sin darse cuenta de nada, madre mía.” pensaba ella para después del segundo plato observar cómo Elena tras levantarse de la mesa, desaparecía por la misma puerta que lo había hecho Augusto segundos antes. Y con disimulo se levantó y traspaso aquella puerta encontrándose en los aseos donde oyó sus risas. Una vez confirmado lo que intuía pego una patada en la puerta  donde estaban los amantes riendose para abrirla y les grito

— ¡La madre que os parió! .¡¡Pero cómo podéis tener la poca vergüenza de estar aquí dentro follando como conejos.¡¡

– ¡No te muevas! – Grito Elena  intentando taparse con las manos sus vergüenzas.

— Maldita sea… ¿Pero quien…? — Chillo Lloverás pero no terminó la frase al ver  quien les observaba. Incrédulo por lo que estaba pasando, y sin apenas moverse,  clavó su mirada gélida en Filomena

– Por Dios – Gritó Elena avergonzada -. ¿Quieres dejar de mirarnos con esa cara?

–  Sabia que eras  una mala persona Elena Padilla pero no me imagine que tanto ¿Cómo has podido hacer esto a 24 horas de tu boda ?- Dijo con ojos de  furia

No consiguió decir más, ante aquella situación era tan de folletín barato, que por un momento  la pobre Filomena pensó que estaba soñando. Pero no. No soñaba. Estaba sucediendo. Aquellos eran Elena y Augusto pillados en pleno acto

— Pero esto no se va a quedar así  , eso te lo aseguro. Ya te puedes ir olvidando de tu boda con Diego porque esto lo va a saber y ahora mismo

—¡¿Cómo?! ¡No puede ser! ¡Imposible! — Chilló Elena histérica.

Mientras Augusto, de un salto, se levantó del suelo y  acercándose a Filo le sisea

-No me gustas y no te gusto , eso ambos lo sabemos ¿Verdad?. Pero menos me gusta tener que ensuciarme las manos de sangre por culpa de una chacha chismosa , por lo tanto si en algo valoras tu vida y la de Diego mas vale que te quedes callada porque de lo contrario vas acabar muy pero que muy mal te lo aseguro-

Filo intenta zafarse de Augusto pero el no se lo permite. La empuja contra la pared y agarrándola del cuello y a punto de asfixiarla le exige de muy mala leche que mantenga su boca cerrada. Elena en ese momento toma las riendas y saliendo del baño junto con Filo se acerca a donde esta Diego y le miente diciendo que esta se encontraba enferma y que la acompañaría a casa, allí esta le exige pistola en mano que escriba una carta a Diego en la que le dice que se va de su lado y de Madrid

-¿Cómo sabes que no voy a volver?. Podría hacerlo o no irme directamente o llamar

-Soy mas lista que tu querida ¿Crees que no voy asegurarme de que te montas en ese tren hacia Bilbao? ¿Y de que tus llamadas jamás lleguen?. Y si es posible que vuelvas pero para ese momento yo ya estaré felizmente casada con el padre de mi hijo

-Ese niño no es de Diego ¿Verdad?.-Le pregunto irónicamente Filo

-Tendrás que vivir con la intriga y ahora vamos date prisa que el tren hacia las vascongadas sale dentro de una hora y media y tenemos que comprar todavía el billete  o eso me han dicho en la RENFE-Le contesto esta amenazándola con la pistola de Augusto. Al llegar a casa Diego vio la carta de despedida de su nana y se fue a  la cama a dormir, al día siguiente le esperaba el día mas duro de su vida: Su boda.

Acerca de janessi

tierna pero no debil,me encanta escribir,follar,fumar , leer a rafael alberti y garcia lorca. actriz frustrada, en otra vida sera, estudio secretariado,trabajo de cajera en un supermercado y mi sueño actual es ser ertainza y vivir en donosti
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